lunes, 27 de julio de 2009

Con Suavidad sin Prisas

1. ¡NO HAY CASI NADA QUE SE PUEDA DISFRUTAR CON PRISAS! Una copa de vino, un paseo, una conversación, un viaje, un paisaje, una comida, ¡o un abrazo! Dios rara vez tiene prisa. Necesita tiempo para crear un bebé, una flor, un árbol, una puesta de sol, y hasta una brizna de hierba. Él casi nunca tiene prisa, ¡a menos que esté enojado! Rara vez hace algo repentinamente, ¡excepto juzgar!

2. ES CURIOSO, CUANDO YO ERA CHICO ME SENTABA EN UNA COLINA Y PENSABA COSAS ASÍ. Cavilaba y me preguntaba lo que significaban las cosas. Todo era una ilustración de algo, ¡todo expresaba algo!

3. EL MAR SIEMPRE ESTÁ TRANQUILO, sereno, en calma, sosegado, salvo cuando hay tormenta.

4. LA VELOCIDAD MATA. LA PRISA CONSUME. LA PACIENCIA REQUIERE FE. Cuando tienes prisa, pasas cosas por alto, pierdes cosas, las olvidas, y te agotas enseguida. Echas una cana al aire, pero tal vez no podrás soportar las consecuencias. Te casas corriendo, ¡y luego te sobra tiempo para arrepentirte! Ganas un minuto, ¡pero pierdes toda una vida! Es como ahorrar un centavo y derrochar una fortuna.

5. SI VAS DESPACIO, LLEGAS ANTES. POR LO MENOS LLEGAS. Más vale tarde que nunca. ¡Más vale andar sobre seguro que arrepentirse luego! Antes que te cases, mira lo que haces, ¡y quizá no tengas que casarte! ¡Por un clavo se pierde una herradura! Se necesita tiempo para apuntar bien.

6. EN EL EJÉRCITO* NOS PONÍAN BLANCOS MÓVILES que aparecían por un momento y luego desaparecían. Algunos compañeros se daban tanta prisa en disparar por temor a que desapareciera el blanco, que fallaban el tiro. Pero yo esperaba hasta estar seguro de que acertaría el blanco, y era un tirador de primera. ¡Era un tirador experto, acertaba 9 de cada 10 tiros en competición! ¡Algunos tenían tanta prisa y se ponían tan nerviosos que movían el fusil, y apretaban tan rápido el gatillo que sacudían toda el arma y fallaban el tiro! Pecar es errar el tiro. Yo me lo tomaba con calma: apoyaba el codo firmemente, sujetaba el fusil bien fuerte, apuntaba con precisión, ¡y apretaba el gatillo lentamente, con suavidad! Con suavidad, sin prisas; ¡o fallarás en algo! ¡No se ganó Zamora en una hora! ¡El Señor me dijo en una ocasión que para construir una casa se necesitaba tiempo! Una vez que tenía mucha prisa por hacer algo, por saber algo para tomar una decisión, Él me dijo: «Primero hay que echar unos cimientos sólidos; luego se coloca firmemente ladrillo sobre ladrillo y piedra sobre piedra uniéndolos con argamasa, cuidando que encajen bien, y eso no se puede hacer a toda prisa; de lo contrario, se vendrá abajo la pared. A continuación, por encima hay que montar el tejado de forma segura, poner las vigas, los pares y las tejas de uno en uno. Después intervienen los yeseros; luego los pintores; y por último los acabadores, que ponen las puertas y ventanas, los suelos y techos. Y así, por fin, se tiene un edificio bien concertado, hermoso a la vista, ¡una estructura bien hecha, construida despacio y a conciencia, para que dure!»

[* David fue reclutado por el ejército norteamericano durante la Segunda Guerra Mundial. Fue dado de baja por razones médicas luego de un serio caso de neumonía doble que reveló una afección cardiaca. No prestó servicio activo y aquí se refiere al entrenamiento que recibió antes de ser dado de baja.]

7. SIN EMBARGO, HE VISTO CASAS CONSTRUIDAS A TODO CORRER SOBRE LAS QUE ALGUNOS CONTRATISTAS NADA HONRADOS SOLÍAN BROMEAR: «Duran lo suficiente para salir antes de que se le desplomen a uno encima.» ¡Y fueron precisamente esa clase de construcciones las que se derrumbaron con el vendaval, causando la muerte a sus ocupantes! Cuando el gran huracán de Miami* vi miles de edificios de ésos destruidos; y murieron miles de personas por causa de aquellas casas hechas mal y con prisas que no fueron capaces de resistir los vientos de la adversidad.

[* Un huracán de categoría 4 que devastó la ciudad de Miami en septiembre de 1926. Entre 25.000 y 50.000 personas se quedaron sin hogar.]

8. PUEDES ESTAR TRANQUILO EN MEDIO INCLUSO DE UNA TORMENTA si sabes que estás a salvo y protegido dentro de un edificio seguro, fuerte, sólido, bien construido; que aguanta cualquier vendaval. Un edificio bien construido no sale volando; no se lo lleva la tormenta. ¡Se mantiene firme hasta que ésta amaina!

9. TENÍAMOS PRISA POR LLEGAR A CASA PARA PONERNOS A TRABAJAR —a escribir—, pero en vez de correr nos sentamos sobre un muro de piedra al lado de una calle muy concurrida para disfrutar un momento de la vista. Y fue entonces cuando recibimos esta inspiración.

10. CUANDO ESTÁBAMOS ALLÍ SENTADOS, UN NUMEROSO GRUPO DE CHAVALES SABRAS* EN EDAD ESCOLAR SE DETUVO CURIOSO A PREGUNTARNOS QUIÉNES ÉRAMOS, de dónde veníamos y que hacíamos; nos dijeron ilusionados cómo se llamaban, nos hablaron un poco en un inglés chapurreado y nos preguntaron qué nos parecía Israel. Les contestamos: «Israel es maravilloso, ustedes son maravillosos, hace un tiempo estupendo y Dios es maravilloso.» Ellos se sonrieron y rieron muy complacidos, se despidieron muy animados y prosiguieron su camino; debían de ser unos veinticinco chicos. Si hubiéramos andado corriendo y no nos hubiéramos parado a sentarnos y disfrutar del panorama, nos habríamos perdido la interesante experiencia de conocer a aquellos muchachos israelíes tan encantadores, cordiales y amistosos.

[* El término sabras se refiere a israelíes nacidos en el actual estado de Israel. La palabra procede del hebreo tsabar y significa tunas, la fruta de cierta planta que crece en el desierto. Esta Carta fue escrita mientras David y María visitaban Israel.]

11. ¡EL IMPÍO SE APRESURA A PECAR CON LA LENGUA, y con los pies, y con las manos! ¡Mas nosotros debemos aguardar al Señor! El que espera al Señor tendrá nuevas fuerzas, ¡y no se cansará! «Tú guardarás en completa paz a aquél cuyo pensamiento en Ti persevera; porque en Ti ha confiado.» «Los que creen han entrado en el reposo.» «¡A Su amado dará Dios el descanso!» (Proverbios 1:16; Isaías 40:31, 26:3: Hebreos 4:9-10; Salmos 127:2)

12. ¡DESCANSA EN EL SEÑOR! para tener paciencia hay que tener fe. Y la tribulación produce paciencia, ¡porque te obliga a confiar en el Señor, a tener fe en que Dios lo arreglará todo! (Salmos 37:7; Romanos 5:3)

13. LOS IMPÍOS SON COMO EL MAR EN TEMPESTAD, QUE NO PUEDE ESTARSE QUIETO. «No hay descanso, dijo mi dios, para los impíos.» Son llevados de un lado a otro y no pueden descansar. ¡Para los impíos no hay descanso! (Isaías 57:20)

14. «¡PERO QUEDA UN REPOSO PARA LOS HIJOS DE DIOS!» (Hebreos 4:9)

15. ¡CON SUAVIDAD!… SIN PRISAS, O FALLARÁS EN ALGO, ¡y fallar el blanco de Dios es pecado!

16. CUANDO MOISÉS QUISO LIBRAR A TODA PRISA A LOS HIJOS DE DIOS, MATÓ AL EGIPCIO y tuvo que huir solo para salvar únicamente su propia vida. Pero tras 40 años apacentando ovejas humilde y pacientemente en el desierto, con tiempo para escuchar la voz de Dios en lugar de sus propios impulsos, estuvo listo para la misión lenta y laboriosa del Éxodo, que requería paciencia. ¡Lenta, pero segura! (Hechos 7:22-36)

17. ¡LA LIEBRE NO LLEGÓ, PERO LA TORTUGA SÍ!

18. LUEGO SE PASÓ 40 DÍAS Y 40 NOCHES ESCUCHANDO A DIOS EN LA MONTAÑA, mas en un arranque de ira quebró los Diez Mandamientos y lo echó todo a perder; luego tuvo que regresar y pasarse allí otros 40 días; su prisa le costó el doble de tiempo. (Éxodo 32:15-20, 34:1-2)

19. CUANDO ÍBAMOS A ALGUNA REUNIÓN O CITA, MI MUJER ACOSTUMBRABA A DECIRME: «Mira, cariño, hoy no tenemos tiempo para tus atajos.» Porque ya sabía lo que sucedía normalmente cuando yo cortaba a campo traviesa buscando una ruta más corta: ¡Por lo general terminábamos completamente perdidos y llegábamos más tarde que nunca!

20. ¡CON SUAVIDAD!… SIN PRISAS, O FALLARÁS EL BLANCO, Y ESO ES PECADO.

21. A VECES MI MUJER SE IMPACIENTA MUCHO CONMIGO porque no le respondo inmediatamente cuando me pregunta algo; pero es que hace falta tiempo para pensar y orar, y estar seguro de que la respuesta que das es la correcta. Cualquiera puede abrir la boca y soltar cualquier cosa, pero ¿seguro que está diciendo algo en realidad? Sé tardo para hablar y tardo para airarte. Ve despacio. Tómatelo con clama, que así disfrutarás más; ¡incluso al hacer el amor! Le sacarás más jugo a la vida. (Santiago 1:19)

22. MI PADRE CANTABA UNA CANCIONCILLA QUE DECÍA: «Por nada te preocupes, te apresures ni te perturbes, si no quieres terminar acosado, casado o enterrado.»

23. CON SUAVIDAD… SIN PRISAS O FALLARÁS EL BLANCO, ¡Y ESO ES PECADO!

24. «VE A LA HORMIGA, OH PEREZOSO.» Pero incluso para estudiar todas las graciosas actividades de las hormigas y aprender algo de ellas hace falta tiempo. «En lo que se refiere a diligencia, no perezosos.» El perezoso se pasa el día entero colgado de una rama con los ojos cerrados, dormitando; apenas se mueve, y llega a parecer parte del árbol. No sólo es lento, ¡sino que se comporta como si estuviese muerto! (Proverbios 6:6; 22:29)

25. CUANDO HACÍAMOS PRÁCTICAS DE TIRO, YO NO ME PRECIPITABA, PERO TAMPOCO ME OLVIDABA POR COMPLETO DE DISPARAR. Me tomaba un tiempo razonable para apuntar con precisión y apretar el gatillo con suavidad, ¡sin prisas!

26. «SÉ MODERADO EN TODO. ¡Que vuestra gentileza sea conocida de todos los hombres!» No corras demasiado, no sea que tropieces, pero tampoco te quedes parado; ¡haz algo, pero anda con diligencia! (1 Corintios 9:25; Filipenses 4:5; Efesios 5:15)

27. CON SUAVIDAD, SIN PRISAS, O PUEDE QUE FALLES EL BLANCO, ¡Y ESO ES PECADO!

DBB.

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